Contenidos
- 1 La separación de Nut y Geb en la mitología egipcia
- 2 ¿Quiénes eran Nut y Geb?
- 3 El comienzo del caos y el orden en el mundo
- 4 Ra y Shu: los encargados de separar el cielo y la tierra
- 5 La separación de Nut y Geb: el nacimiento del cielo y la tierra
- 6 El nacimiento de los dioses egipcios más importantes
- 7 Significado del mito de Nut y Geb en la cultura egipcia
- 8 ¿Por qué los antiguos egipcios veían el cielo como una diosa?
- 9 Lecciones para niños y jóvenes sobre el mito del cielo y la tierra
- 10 Actividades y recursos sobre Nut, Geb y la mitología egipcia
La separación de Nut y Geb en la mitología egipcia
En la antigua mitología egipcia, muchas historias explicaban cómo se formó el mundo. Una de las más hermosas y poderosas es la separación de Nut y Geb, el cielo y la tierra. Este relato explica cómo nació el universo y por qué el cielo se encuentra tan alto sobre nuestras cabezas. En este cuento mitológico conoceremos a Nut, la diosa del cielo, a Geb, el dios de la tierra, y a su padre Shu, el dios del aire.
¿Quiénes eran Nut y Geb?
Nut, la diosa del cielo
Nut era la diosa del cielo en la mitología egipcia. Su cuerpo se curvaba sobre la tierra, cubierto de estrellas. Los antiguos egipcios creían que cada noche Nut tragaba al dios sol Ra, y cada mañana lo volvía a dar a luz, haciendo salir el sol.
Geb, el dios de la tierra
Geb, su hermano y esposo, era el dios de la tierra. Su cuerpo formaba montañas, valles y desiertos. Se decía que cuando Geb reía, la tierra temblaba. Estaba enamorado de Nut, y juntos formaban una sola unidad: cielo y tierra abrazados por toda la eternidad.
El comienzo del caos y el orden en el mundo
Al principio de los tiempos, el cielo y la tierra estaban unidos, y el universo era oscuro y silencioso. Nut y Geb estaban tan juntos que no quedaba espacio para que nada más existiera. Ni el aire, ni la luz, ni la vida podían moverse entre ellos. Ra, el dios del sol y creador del orden, observó con preocupación.
Ra y Shu: los encargados de separar el cielo y la tierra
Ra toma una decisión divina
Ra, al ver que no había espacio para el resto de sus creaciones, llamó a Shu, el dios del aire y la atmósfera. Shu era también el padre de Nut y Geb. Ra le dijo:
— Shu, debes separar a tus hijos. Debemos crear el orden a partir del caos. El cielo debe ir arriba, y la tierra debe quedarse abajo.
Shu sabía que esa orden rompería el amor entre Nut y Geb, pero obedeció al dios sol.
La separación de Nut y Geb: el nacimiento del cielo y la tierra
Shu levanta a Nut hacia el firmamento
Con un gran esfuerzo, Shu colocó sus manos entre Nut y Geb. Con fuerza y dolor, alzó a Nut, curvando su cuerpo sobre la tierra. Nut lloró por estar tan lejos de Geb, y sus lágrimas se convirtieron en estrellas. Geb, desde abajo, se agitó en tristeza, y su piel tembló: así nacieron las montañas y los terremotos.
Shu se mantuvo firme entre ambos, sosteniendo el cielo para que no volviera a caer. Desde entonces, Nut se alza sobre nosotros cada día, mientras Geb yace abajo, sosteniéndonos con su cuerpo de tierra.
El nacimiento de los dioses egipcios más importantes
Los hijos de Nut y Geb
Antes de ser separados, Nut y Geb tuvieron cinco hijos: Osiris, Isis, Seth, Neftis y Horus el Viejo. Cada uno de ellos jugaría un papel esencial en otras leyendas egipcias. Por eso, esta historia también explica el origen de los dioses del Antiguo Egipto.
Estos dioses traerían tanto bendiciones como conflictos al mundo de los hombres, pero gracias a ellos también llegarían el amor, la justicia, el caos y la protección.
Significado del mito de Nut y Geb en la cultura egipcia
Este mito no solo explica la creación del cielo y la tierra, sino también el orden natural del universo para los antiguos egipcios. Para ellos:
- Nut protegía el mundo desde arriba, cada noche cubriendo el mundo con su manto estrellado.
- Geb proporcionaba fertilidad, alimento y estabilidad desde abajo.
- Shu mantenía el equilibrio entre ambos, como símbolo del aire y la armonía.
Esta historia está grabada en las paredes de templos y tumbas, y es uno de los cuentos egipcios más antiguos y sagrados.
¿Por qué los antiguos egipcios veían el cielo como una diosa?
En muchas culturas, el cielo es visto como masculino, pero en Egipto, el cielo era femenino (Nut), y la tierra era masculina (Geb). Esto se debe a cómo veían el universo: la diosa Nut abrazaba y protegía a la tierra como una madre, y la tierra respondía con vida y movimiento.
Lecciones para niños y jóvenes sobre el mito del cielo y la tierra
Este cuento no solo tiene un valor histórico o religioso, también transmite enseñanzas para los más pequeños:
- A veces, hay decisiones que duelen, pero traen orden y equilibrio.
- El amor entre Nut y Geb es tan fuerte que, aunque estén separados, siempre se buscan: así se explica el horizonte, el lugar donde el cielo y la tierra parecen tocarse.
- Cada parte del mundo tiene su función: sin cielo, no habría noche ni estrellas; sin tierra, no podríamos vivir.
Actividades y recursos sobre Nut, Geb y la mitología egipcia
Si quieres seguir aprendiendo sobre Nut y Geb, puedes:
- Leer cuentos mitológicos egipcios para niños.
- Descargar dibujos para colorear de Nut, Geb y Shu.
- Investigar cómo representaban los egipcios a estos dioses en sus jeroglíficos.
- Crear tu propio cuento sobre el cielo y la tierra.
1. Preguntas de comprensión lectora (a partir de 6 años)
Objetivo: comprobar si han entendido el cuento.
- ¿Quiénes eran Nut y Geb?
- ¿Por qué Ra decidió separarlos?
- ¿Qué hizo Shu para cumplir la orden de Ra?
- ¿Qué representan Nut y Geb en la naturaleza?
- ¿Cómo explicaban los egipcios la salida del sol gracias a Nut?
2. Dibuja la escena del mito (a partir de 5 años)
Indicaciones:
- Dibuja a Nut como una mujer arqueada sobre la tierra, llena de estrellas.
- Dibuja a Geb tumbado debajo, tocando la tierra con su cuerpo.
- En medio, pinta a Shu con los brazos alzados separándolos.
➡️ Ubícalo después del apartado “¿Por qué los egipcios representaban el cielo como una mujer?”
3. Ordena la historia (a partir de 7 años)
Recorta y mezcla estas frases para que el niño las ordene correctamente:
- Ra decidió que había que separar el cielo de la tierra.
- Shu levantó a Nut hacia el cielo.
- Nut y Geb estaban abrazados, sin espacio para nada más.
- Geb quedó como la tierra, Nut como el cielo.
- Así nacieron el aire, la luz y la vida.
4. Juego de roles o teatro breve (a partir de 8 años)
Personajes: Narrador, Ra, Shu, Nut, Geb.
Objetivo: dramatizar el mito con voces, gestos y disfraces caseros.
Fragmento sugerido: cuando Ra le pide a Shu que separe a sus hijos y Shu lo hace.
5. Inventa un final alternativo (a partir de 9 años)
5. Inventa un final alternativo (a partir de 9 años)
Instrucción: ¿Qué pasaría si Shu no separara a Nut y Geb? Escribe un pequeño cuento inventado con un final distinto.