La venganza de Horus contra Seth: el mito egipcio del heredero del trono

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Descubre el legendario mito egipcio de la venganza de Horus contra Seth, una historia llena de valentía, magia y justicia divina. Un cuento mitológico adaptado para niños y jóvenes que revela la lucha por el trono del antiguo Egipto.


El cuento mitológico de la venganza de Horus contra Seth: justicia en el antiguo Egipto

Hace mucho, mucho tiempo, cuando los dioses caminaban entre los hombres y el Nilo fluía majestuoso por las tierras del antiguo Egipto, ocurrió una historia que marcaría el destino de todo el reino. Fue una historia de traición, coraje y justicia divina: la venganza de Horus contra Seth.

El crimen de Seth

Osiris, el gran dios del orden y la fertilidad, reinaba con sabiduría sobre Egipto. Su esposa, la diosa Isis, era admirada por su inteligencia y compasión. Juntos gobernaban con justicia, y su pueblo vivía en paz. Pero había alguien que envidiaba el poder de Osiris: su propio hermano, Seth, el dios del caos y las tormentas.

Cegado por la ambición, Seth asesinó a Osiris en secreto, encerrando su cuerpo en un ataúd que arrojó al Nilo. El río lo llevó lejos, y Seth se proclamó rey, imponiendo un reinado de miedo y confusión. Isis, devastada, buscó por todo Egipto los restos de su esposo. Cuando finalmente los encontró, lo escondió y, con su magia, logró concebir un hijo: Horus, el heredero legítimo al trono.

El nacimiento de Horus

Isis crió a Horus en secreto, lejos del ojo vigilante de Seth. En los pantanos del delta del Nilo, lo protegió con hechizos y la ayuda de otras deidades. Horus creció fuerte, con la mirada del halcón, el símbolo de los faraones. Su destino estaba claro desde el principio: vengar la muerte de su padre y recuperar el trono de Egipto.

Cuando Horus alcanzó la adultez, se presentó ante los dioses del tribunal divino, liderado por Ra, el dios del Sol. Allí exigió justicia: el trono que Seth había usurpado debía serle entregado a él, como legítimo hijo de Osiris.

Pero Seth no estaba dispuesto a ceder. Desafió a Horus a una serie de pruebas, convencido de que podía derrotarlo y demostrar su superioridad.

Las pruebas entre Horus y Seth

El primer desafío fue una carrera transformados en hipopótamos. Debían permanecer bajo el agua durante tres días y tres noches. Seth, confiado, no sospechó que Isis había lanzado un hechizo para proteger a su hijo. Cuando el tiempo terminó, Horus emergió ileso, mientras Seth, agotado, apenas pudo salir a flote.

En otra prueba, debían construir barcos de piedra. Seth talló uno macizo, que se hundió en cuanto tocó el agua. Horus, en cambio, construyó uno de madera y lo cubrió de yeso para que pareciera de piedra. Su barco flotó, provocando la risa del tribunal. Seth, furioso, destrozó su embarcación.

Pero la prueba más extraña fue una competencia de fuerza mágica, en la que los dos dioses se transformaron en animales y lucharon. Horus se convirtió en un halcón majestuoso y Seth en un poderoso jabalí negro. Durante el combate, Seth le arrancó a Horus un ojo, conocido más tarde como el Ojo de Horus, símbolo de protección y poder en el antiguo Egipto.

La recuperación del Ojo de Horus

Aunque herido, Horus no se rindió. Con la ayuda de Thot, el dios de la sabiduría, recuperó su ojo. Thot lo curó con un hechizo sagrado, y ese ojo restaurado se convirtió en un poderoso amuleto de curación, conocido como el Udyat.

Isis, por su parte, capturó a Seth con su magia, pero el joven Horus, en un acto de compasión que desconcertó a todos, lo dejó libre. Este gesto fue malinterpretado por los dioses, que dudaron por un tiempo si Horus era digno del trono. Aun así, Horus no dejó de luchar por la justicia.

El juicio final de los dioses

Después de años de disputas y desafíos, los dioses finalmente se reunieron para emitir un juicio definitivo. Ra escuchó a todos, y Maat, la diosa de la verdad y el orden, presentó sus argumentos. La balanza de la justicia debía inclinarse por quien representara mejor el equilibrio y el legado de Osiris.

El tribunal reconoció que Horus había demostrado valentía, justicia y compasión. Además, era el hijo legítimo del antiguo rey. Por fin, se proclamó que Horus era el nuevo soberano del Alto y Bajo Egipto. Seth fue desterrado al desierto, donde el caos aún lo acompaña, y Horus reinó como un faraón divino, manteniendo el orden y la prosperidad.

El legado de la venganza de Horus

El mito de la venganza de Horus contra Seth se convirtió en uno de los relatos más importantes del antiguo Egipto. Representa la eterna lucha entre el orden y el caos, entre la justicia y la tiranía. También enseña que el perdón, aunque difícil, es una virtud de los verdaderos líderes.

El Ojo de Horus se volvió un símbolo sagrado, usado en amuletos y templos para proteger a los vivos y guiar a los muertos en el más allá. Y el nombre de Horus se convirtió en el título que llevaban todos los faraones, recordando que cada rey debía regir con justicia y equilibrio.

Curiosidades del mito de Horus y Seth

  1. El Ojo de Horus como amuleto protector: En el antiguo Egipto, el Ojo de Horus era un símbolo poderoso que protegía a las personas contra el mal, las enfermedades y los peligros. Se colocaba en joyas, estatuas y tumbas para cuidar a los vivos y a los muertos.
  2. Horus representa al faraón: Cada faraón era considerado la encarnación de Horus en la Tierra, por eso el título real incluía el nombre de Horus, simbolizando su derecho divino a gobernar.
  3. Seth no siempre fue malo: En algunos relatos, Seth era un dios protector del desierto y guardián de Ra en su viaje nocturno. Su rol cambió con el tiempo hacia el dios del caos.
  4. La rivalidad que duró generaciones: La lucha entre Horus y Seth simboliza el eterno conflicto entre el orden y el desorden, tema central en muchas mitologías.
  5. Thot, el dios de la sabiduría, como sanador: La intervención de Thot para curar el ojo de Horus muestra la importancia de la sabiduría y la inteligencia en la mitología egipcia.

Ejercicios de comprensión lectora sobre el mito de Horus y Seth

1. Preguntas de respuesta corta:

  • ¿Quién era Osiris y qué le pasó?
  • ¿Por qué Seth mató a Osiris?
  • ¿Dónde crió Isis a Horus?
  • ¿Qué símbolo perdió Horus durante la lucha?
  • ¿Quién ayudó a curar el ojo de Horus?

2. Verdadero o falso:

  • Seth era el dios del orden y la paz.
  • Horus y Seth tuvieron que superar varias pruebas para decidir quién gobernaría Egipto.
  • Horus derrotó a Seth sin ayuda de otros dioses.
  • El Ojo de Horus simboliza protección y poder.
  • Seth fue perdonado y siguió gobernando Egipto.

3. Actividad de reflexión:

  • ¿Por qué crees que Horus decidió perdonar a Seth en lugar de destruirlo?
  • ¿Qué valores muestra la historia de Horus y Seth que pueden ser importantes para nosotros hoy?
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