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Las aventuras y desventuras de Bata, una leyenda de la mitología egipcia.
Esta es una historia muy antigua, que se conserva en un papiro llamado “El cuento de los dos hermanos”,
Érase una vez, dos hermanos que vivían en el antiguo Egipto. El mayor se llamaba Anubis, y el menor se llamaba Bata. Los dos eran pastores, y cuidaban de sus rebaños de ovejas y vacas. Se querían mucho, y se ayudaban en todo. Anubis estaba casado con una mujer, y Bata vivía con ellos en su casa.
Un día, Anubis le dijo a Bata que fuera a buscar más semillas al granero, para sembrar el campo. Bata obedeció, y fue a la casa. Allí se encontró con la mujer de Anubis, que le miró con malos ojos. Ella le dijo que se acostara con ella, y que no se lo diría a nadie. Pero Bata se negó, y le dijo que eso era una falta de respeto a su hermano. Entonces, cogió las semillas y se fue al campo.
La mujer de Anubis se enfadó mucho, y decidió vengarse de Bata. Se untó la cara con grasa, y se hizo unas heridas. Luego, se echó a llorar, y esperó a que volviera. Cuando Anubis llegó, le preguntó qué le había pasado. Ella le mintió, y le dijo que Bata había intentado hacerle cosas malas, y que por eso se había defendido. El Dios se puso furioso, y cogió un cuchillo. Salió corriendo hacia el campo, para matar a Bata.
Bata vio venir a Anubis con el cuchillo, y se asustó. No sabía por qué su hermano quería hacerle daño. Entonces, le pidió ayuda al dios Ra, el dios del sol. Ra le escuchó, y le protegió. Hizo que se formara un gran lago entre los dos hermanos, lleno de cocodrilos. Así, el Dios de la otra vida no pudo alcanzar a Bata.
Bata le gritó que era inocente, y que su mujer le había mentido. Le contó lo que había pasado, y le pidió que le creyera. Pero Anubis no le creyó, y le dijo que era un traidor. Bata se entristeció, y decidió irse lejos, al valle de los cedros. Allí, se sacó el corazón, y lo puso sobre una flor. Le dijo a Anubis que si algún día le perdonaba, fuera a buscar su corazón, y lo pusiera en agua. Así, él volvería a la vida. Pero si alguien cortaba el árbol donde estaba la flor, él moriría para siempre. Y le dijo que la señal de su muerte sería una jarra de cerveza que se derramaría.
Anubis volvió a su casa, y mató a su mujer. Luego, se quedó solo, y se arrepintió de haber tratado mal a Bata. Esperó a que Bata volviera, pero no volvió. Un día, pidió una jarra de cerveza, y se le derramó. Entonces, supo que Bata había muerto, y se puso a llorar. Decidió ir al valle de los cedros, a buscar su corazón. Estuvo buscando durante muchos años, hasta que al fin lo encontró. Lo puso en agua, y su joven hermano resucitó.
Los dos hermanos se abrazaron, y se pidieron perdón. Bata le contó a Anubis que los dioses le habían dado una esposa muy hermosa, y que vivía con ella en el valle. Anubis se alegró por él, y le dijo que se quedara con ella. Luego, se despidieron, y cada uno siguió su camino.
Bata vivía feliz con su esposa, que era la más bella de todas las mujeres. Tanto, que el faraón, que era el rey de Egipto, se enamoró de ella, y quiso casarse con ella. Pero ella le dijo que solo se casaría con él si le traía el árbol donde estaba el corazón de Bata. El faraón mandó a sus hombres a cortar el árbol, y se lo llevó al palacio. Así, Bata murió otra vez, y su esposa se casó con el faraón.
Anubis se enteró de lo que había pasado, y fue a buscar a Bata. No encontró su corazón, y se puso muy triste. Pero entonces, oyó una voz que le decía que Bata se había reencarnado en un toro. Anubis fue a ver al toro, y lo reconoció. Era Bata, que le habló, y le contó lo que había hecho el faraón. Anubis se enfadó, y le dijo que se vengaría. Vendió el toro al faraón, y se llevó el dinero.
El faraón se quedó con el toro, y lo cuidó mucho. Pero el toro no estaba contento, y un día se escapó. Fue al palacio, y buscó a su esposa. La encontró, y le dijo que él era Bata, y que el faraón le había matado. Ella se asustó, y le dijo al faraón que el toro era un brujo, y que había intentado hacerle daño. El faraón mandó a matar al toro, y a quemar su cuerpo.
Pero de las cenizas del toro salieron dos gotas de sangre, que se convirtieron en dos árboles. Los árboles crecieron mucho, y eran muy bonitos. El faraón los vio, y los mandó cortar, para hacerse una silla y una mesa. Pero de la madera de los árboles salió una astilla, que se metió en el ojo de la esposa del faraón. Ella se quedó embarazada, y tuvo un hijo. El hijo era Bata, que había vuelto a nacer.
Bata creció, y se hizo un niño muy guapo y muy listo. El faraón lo quería mucho, y lo nombró su heredero. Pero Bata no olvidaba lo que le había hecho, y un día le dijo la verdad. Le dijo que él era Bata, y que él había sido su esposo, y que él le había matado tres veces. El faraón se quedó sin habla, y no supo qué decir. Bata le perdonó, y le dijo que se quedaba con el trono de Egipto. El faraón aceptó, y se retiró a vivir en paz.
Bata se convirtió en el nuevo faraón, y mandó llamar a Anubis. Los dos hermanos se reunieron, y se abrazaron. Bata le dijo a Anubis que se quedara con él, y que fuera su consejero. Anubis aceptó, y se quedó con él. Los dos vivieron felices, y gobernaron Egipto con justicia y sabiduría.
FIN
Reflexiones de la leyenda: Las Aventuras y Desventuras de Bata
Es una historia muy antigua, que se conserva en un papiro llamado “El cuento de los dos hermanos”, algunas posibles reflexiones de la leyenda, Las aventuras y desventuras de Bata son:
- La historia muestra la importancia de la familia, la fraternidad, y la lealtad. Los dos hermanos, Anubis y Bata, se quieren mucho, y se ayudan en todo. Pero su relación se rompe por una mentira, y por la ira y la venganza. La historia nos enseña que debemos confiar en nuestros seres queridos, y no dejarnos engañar por las apariencias o por las malas intenciones. También nos enseña que debemos perdonar a los que nos hacen daño, y reconciliarnos con ellos.
- También muestra la influencia de los dioses, el destino, y la magia. Los dioses intervienen en la vida de los hombres, y les protegen o les castigan. El destino hace que Bata se reencarne varias veces, y que al final se convierta en faraón. La magia permite que Bata se transforme en diferentes formas, y que hable con los animales y las plantas. La historia nos muestra la visión que tenían los egipcios sobre el mundo y la otra vida, y cómo se relacionaban con sus dioses y con la naturaleza.
- Por último, el contraste entre el campo y la ciudad, y entre la vida sencilla y la vida lujosa. Los dos hermanos viven en el campo, y son pastores. Su vida es humilde, pero tranquila y feliz. Pero cuando Bata se va al valle de los cedros, y luego al palacio del faraón, su vida cambia. Su vida se vuelve más rica, pero también más peligrosa y complicada. La historia nos muestra las ventajas y los inconvenientes de cada forma de vida, y cómo se puede adaptar a ellas.
Estas son algunas posibles reflexiones que podemos hacer sobre esta leyenda, pero seguro que hay muchas más. Te invito a que pienses por ti mismo, y que compartas tus ideas con otras personas.
